Llegando el fin del verano, los biker andaluces nos encontramos con un pequeño-gran problema, y es que aprovechando que aún hace buen tiempo pero que remite el calor, en septiembre se multiplican los eventos moteros que se celebran por esta zona, poniéndonos a los bikers en la tesitura de ponernos de acuerdo para ver dónde vamos cada semana. Era sábado y todavía no nos habíamos puesto de acuerdo con la concentración de motos a la que íbamos a acercarnos. Al final se optó por la decisión salomónica de que cada cual se dirigiese hacia donde le diera la gana y de este modo hubo algunos que optaron por la costa y otros por el interior. En mi caso, quedé con Marcos y Asun para acercarnos con los moteros clásicos de Lantejuela a la reunió de motos clásicas de La Victoria, ya que es un grupo que cada año aparece por la reunión de Lantejuela y como decía mi abuela es de bien nacidos ser agradecidos. A pesar de que había una hora estipulada para salir todos juntos desde el Pub Benjumea el trayecto fue un poco caótico en el sentido que el grupo se abrió y se separó en tres frentes. Yo me adelanté para recoger a Marcos en Écija pero para mi sorpresa me quedé sin gasolina llegando al cruce de El Rubio. Menos mal que con la reserva llegué sin ningún problema...Mientras echaba gasolina vi pasar un par de grupos de los que íbamos desde Lantejuela y salimos corriendo por la autovía para cogerlos, pero para nuestra sorpresa sólo adelantamos al sidecar de Corrales....¿Dónde se han metido? No creo que esas antiguallas vayan a 130 por la autovía. Llegados a la reunión lo primero fue buscar un garito para desayunar y matar el gusanillo "mañanero". De vuelta a la reunión nos encontramos con el resto del personal que nos contaron que cada uno tiró por un itinerario diferente huyendo de la autovía. Estuvimos una hora más o menos viendo esas maravillas con ruedas que se resisten a envejecer y algunos puestos bastante interesantes de accesorios y repuestos. Llegada la hora del recorrido en moto, Marcos y yo decidimos dejar el grupo y hacer algunos kilómetros más acercándonos hasta la reunión de Nueva Carteya para ver el ambiente y hacer algunos kilómetros. Un despiste nos hizo saltarnos la carretera que buscaba así que decidí seguir hacia Cabra para tomar la carretera hasta este pueblo en el que nunca he estado.... Mala elección de carretera...Eso era poco más que un camino de cabras, muy retorcido. Para colmo, con las vibraciones y los baches el soporte de la matrícula perdió los tornillos y lo llevaba colgando. Menos mal que mi compañero de ruta se puso en paralelo y me avisó. Con un juego de destornilladores solucionamos el problema y conseguimos llegar al pueblo pasando por un puerto de montaña que por lo menos nos dejó algunas buenas vistas. Al llegar a la reunión nos encontramos que también habían salido a dar la vuelta turística, así que nos tomamos unas cervezas en la barra de la reunión y tomamos el camino de vuelta ya que la ruta por el puerto de montaña nos hizo perder mucho tiempo y había que estar de vuelta a una hora prudencial. El camino no tuvo mayores dificultades ya que las vías estaban bien asfaltadas y el trazado invitaba a rodar rozando los límites de la legalidad.
Nos vemos en la carretera.
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