Una vez más, se me acumula la tarea. Hace ya varias semanas que volvimos a acercarnos por la concentración de nuestros amigos de Las Záguilas del Saucejo (Sevilla). Un evento, donde sabes que te encontrarás con un buen puñado de amigos y conocidos.
Como ya va siendo habitual en mí, desde hace un par de años, las circunstancias no me permiten poder pasar todo el fin de semana en la reunión como he hecho en otras ocasiones. Algunos compañeros, si que se fueron a pasar el sábado y nos cantaron que el ambiente había estado genial, como de costumbre, con la ruta al Peñón de Algámitas y por los alrededores. Pero que al llegar la tarde, hizo un calor de justicia.
La mayoría del grupo, quedamos a las 10:00 para desayunar en Lantejuela y tirar para allá. Así que desayunamos algunos de Lantejuela con los colegas de Lora del Río, que iban a ir por primera vez a la reunión de Las Záguilas. Tras el desayuno nos ponemos en marcha hacia Osuna para recoger a unos cuantos colegas de allí y de Gilena. Formada la expedición enfilamos nuestras ruedas hacia la reunión, con una calor considerable a media mañana. En el camino nos encontramos con muchos grupos y bikers solitarios que venían con sus motos cargadas de pasar el fin de semana en Vado Yeso.
Nada más aparcar las motos, comenzamos a saludar a viejos amigos y conocidos de este mundillo de las dos ruedas. Tras los saludos, vamos para la barra a refrescarnos por dentro, no sin antes pararnos en algunos puestos de complementos y camisetas, a disfrutar de algunas de las motos que había por allí, y de las buena infraestructura de este evento. Sale la ruta del domingo, pero nos hemos hecho fuertes en la barra, así que seguimos con el líquido elemento refrescando nuestras gargantas mientras que varios amigos nos cuentan que la noche había sido memorable por los grupos de música y por la chica que calentó el ambiente más aún.
Salimos a buscar a los de la vuelta, ya que iba tocando regresar para cumplir con los compromisos familiares, pero queríamos saludar a algunos amigos que no encontramos por la reunión. Buen ambiente junto al ayuntamiento, bellas máquinas para contemplar y un buen rato rodeados de amigos.
Los que ya somos habituales en este evento no nos cansamos de disfrutarlo, y los que vinieron por primera vez, ya están pensando volver el próximo año a echar la noche.
Nos vemos en la carretera, o en la próxima concentración de Las Záguilas del Saucejo.