viernes, 25 de octubre de 2013

RUTA POR LA SIERRA DE ARACENA


El domingo 20 de octubre nos juntamos unos cuantos de amigos para disfrutar de una ruta por las sierras de de Huelva. Algo sin mayor trascendencia si no fuera porque iba a ser la primera ruta larga de un viejo amigo…Alguien con el que había compartido muchos kilómetros cuando me compré allá por el 93 mi vulcan 500 y con el que hice muchos kilómetros con él de copiloto y con el que había hablado muchas veces de lo que nos gustaría compartir kilómetros cada uno sobre su moto… Pues después de casi 20 años hemos podido hacerlo… El punto de reunión era la Nueva Andalucía junto a la A-92 a las 9:30, así que a las 9:00 salimos desde Lantejuela para ser puntuales con el resto de amigos… Primera novatada: no llevaba guantes largos y se metió toda la ruta con los guantes cortados y eso que hacía rasca…
Una vez reunidos pusimos rumbo a Sevilla para enlazar con las Ruta de la Plata en dirección la Venta del Alto, donde tomaríamos la carretera hacía Río Tinto… Durante el tramo que rodamos por la SE-30 dos compañeros se despistaron y no nos vieron tomar la nacional 630, así tras las típicas llamadas sin contestar, las prisas, los juramentos en arameo y repasar toda la generación del Naranjito llegamos a una venta donde pesábamos que los encontraríamos… No estaban allí pero llegaron antes de que pudiéramos pedir un café.
Con todo el grupo reunido seguirnos la ruta buscando la nacional que sube desde Huelva hasta Badajoz y donde algunos miembros de la expedición disfrutaron de sus motos y del buen número de curvas que tiene esta carretera. Tras un buen puñado de kilómetros y cambiar de carretera llegamos a Almonaster la Real, que era nuestro primer destino para visitar el conjunto formado por las murallas de la antigua fortaleza, la mezquita y la plaza de toros. Al subir con las motos hasta arriba del todo un municipal nos llamó la atención por haber subido por una calle sólo para residentes, pero tras exagerar nuestro despiste lo dejó en un aviso. Tras las fotos de rigor comenzamos a explorar la zona. A mí me traía muchos recuerdos pues hacía varios años ya había visitardo el conjunto y comenté a mis compañeros de viaje que mi casco cayó desde la segunda ventana de la torre hasta el suelo… Por desgracia el acceso a la torre hoy día está prohibido. Supongo que temen que alguien pueda caer al vacío igual que le pasó a mi casco… Después de admirar el conjunto bajamos hasta el pueblo para tomar una cerveza fresquita antes de proseguir la ruta. Tras refrescarnos continuamos por una preciosa carretera totalmente tupida por la vegetación, que nos llevó hasta Cortegana, donde comimos en un local que posiblemente sería hace años el cine de la localidad y donde pudimos apreciar diversos carteles de películas míticas como Gilda o Casa Blanca entre otras. Tras la comida subimos al castillo y la ermita, donde algunos no dejamos pasar la oportunidad de entrar a visitar los torreones de la pequeña fortaleza.
Pero viendo que la tarde pasaba y que la noche se nos echaba encima decidimos poner rumbo directo hacia Sevilla para enlazar con la autovía y ganar tiempo. Lo que no sabíamos es que era la feria del jamón de Aracena y que la carretera iba a estar colapsada de vehículos. O peor aún, que un control de policía nos iba a hacer un alto y a pedirnos hasta la fe de bautismo. Después de un aviso por no llevar pegadas las pegatinas de la ITV nos dejó marchar y seguir nuestro camino… ¡LEÑA AL MONO!. Hasta el novato iba que se las pelaba porque veíamos que la noche nos caía encima. Y así fue… Llegamos a Lantejuela a las 20:45… Casi 12 horas para algo más de 400 kilómetros… Eso si que es un domingo de motos.
Nos vemos en la carretera


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